ECOS DE USUARIOS: “SE FUE UNA GRAN MUJER, MARÍA”, POR JULIA LARRAURI
La grandeza de una persona se mide por su talla humana. Y en ese aspecto, María Iriarte era, más que grande, gigante para todas las personas que la conocieron.
Tristemente, el pasado 1 de marzo María falleció aún joven, a la edad de 56 años. Su reciente pérdida ha dejado un hueco enorme entre sus compañeras y compañeros del grupo 2 de autogestores que en el próximo boletín del Ecos rendirán un sentido y merecido homenaje a su compañera.
Mientras tanto, os dejamos con la emotiva despedida que nos ha hecho llegar Julia Larrauri, compañera y amiga de María desde que se conocieron en el Colegio San José.
¡Hasta siempre, María!
Aunque fuiste de cuerpo menudo
tu fuerza era arrasadora.
Siempre luchaste por lo que tú creías
que era lo mejor tanto para ti como para los demás.
Las últimas visitas antes de que te pusieras peor,
te di un abrazo tremendo.
Después no te volví a ver.
Te quise, te quiero y siempre estarás en mi memoria.
Subida en un árbol con tus compañeros
que eran tan traviesos como tú.
Las profesoras tenían un gusto,
cogerte en brazos y empezaban a dar vueltas.
Te dejaban en clase o en el comedor.
Con todo lo que comías
yo no sé dónde lo metías, la verdad.
Así yo te quiero recordar.
Me despido con mucho placer.
He conocido a una mujer
que rompió muchos esquemas del síndrome de Down.
Mi menuda pero gran compañera y mujer,
¡Hasta que nos veamos en el cielo!
Un abrazo y besos.
Julia Larrauri
