Biografía:
Pilar siempre ha vivido en el caserío familiar de Alda, en pleno corazón de Montaña Alavesa. Durante años, con ayuda de su madre, ha desempañado las tareas de casa, ha cuidado de la huerta y alimentado a los animales. Al quedarse sola, en 1998, entró como residente en el hogar de grupo Foronda de Vitoria-Gasteiz gestionado por Apdema.
La actividad física siempre ha estado muy íntimamente ligada a Pilar.
Su afición se forjó en los paseos que diariamente daba con su padre entre Alda y San Vicente de Arana. Por eso, desde que se incorporó al hogar de grupo Foronda, el deporte y el ejercicio físico siempre han estado presentes en su vida.
Desde entonces, pasear con sus amigas y hacer gimnasia se han convertido en sus actividades favoritas para ocupar su tiempo libre. Los balones y las pesas figuran entre sus referencias en el gimnasio, al que acude de forma regular desde hace tres años.
¿Desde cuándo tienes afición por la gimnasia?
Empecé hace 2 o 3 años, para tener algo más que hacer por las mañanas.
¿De qué te viene esa motivación por estar activa?
Cuando vivía mi padre salía casi todos los días a caminar con él, íbamos desde Alda a San Vicente de Arana y volvíamos. Desde entonces siempre me ha gustado mucho pasear y hacer ejercicio.
¿Dónde practicas gimnasia? ¿Qué te gustaría destacar de esta actividad?
Normalmente hago gimnasia lunes y miércoles por la mañana en el centro cívico de al lado de mi casa. Este trimestre me he quedado sin plaza, pero… ¡A ver si se queda alguna plaza libre para el que viene! Si pudiera, me gustaría continuar.
Me gusta mucho porque hago ejercicios con balones y pesas, y también me gusta mucho la gente, porque casi siempre coincidimos los mismos y son buenos compañeros.
¿Cómo te sientes en esta etapa de tu vida?
Estoy muy contenta con todo, muy satisfecha. Sí que me acuerdo mucho de la huerta, pero son buenos recuerdos. Pero eso sí, ¡ahora mismo no cambio mi casa por nada!.